Esta semana ha sido muy interesante, los niños de 3 años hacen por primera vez un examen.
Durante toda la semana en las primeras horas del día nos hemos dedicado a hacer exámenes, estos consistían en copiar y memorizar las letras de uno de los nombres de los compañeros.
La seño copiaba el nombre en la pizarra, y lo repasaba con los alumnos letra a letra y en voz alta, diciendo el sonido de cada una de las letras. Después el nombre lo buscábamos en el abecedario y veíamos de que color eran las letras que contenía ese nombre y por último contábamos cuantas letras tenía el nombre del compañero que íbamos a estudiar para ver si era largo o corto.
Para la realización la maestra repartió cuartillas de folios y un lápiz. El resultado no fue muy mal, algunos niños escribieron el nombre sin problema, otros pusieron solo las vocales del nombre, otros colocaron las letras de alrevés.
Todo niño que lo hiciera bien se le colocaba una carita feliz y se lo llevaba a casa para enseñarlo a su familia.
Esta es una foto de los exámenes de algunos niños.
Os propongo 8
estrategias para mejorar la atención en clase, aunque esto no suponga que
los niños y niñas mantengan un alto nivel de atención todo el tiempo. Se trata
de pautas que pretenden ser claras y concretas y que se puedan llevar a cabo en
las condiciones actuales del aula, en Infantil, Primaria y también en
Secundaria.
Lo primero que
tenéis que hacer es marcaros un objetivo realista. No se puede pretender
que los alumnos permanezcan con el mismo nivel de atención toda la mañana, los
cinco días de la semana. Eso es inviable. La atención es un recurso
cognitivo limitado y como tal no podemos abusar de él.
2º.
Gestionar el tiempo
La atención fluctúa a lo
largo de una sesión de clase, de la mañana e incluso de la semana. Es lo que se
llama la curva de atención. Se puede decir que solo
contáis con unos minutos de máxima concentración en cada sesión. En
las primeras horas ese período de tiempo puede ser mayor, mientras que en las
últimas horas es tiempo se reducirá.
Por tanto, una segunda
estrategia para mejorar la atención en clase es gestionar el tiempo. Una curva
general sería aquella que en los primeros minutos se intenta centrar la
atención, que consigue mantenerla unos minutos y que puede prolongarla unos
minutos más con los recursos que ahora se exponen, pero que poco a poco va
descendiendo a lo largo de la sesión.
Saber gestionar esta curva genérica implica
introducir actividades que se adapten a ella. Esto supone, saber captar la
atención, realizar las tareas de máximo rendimiento en el momento oportuno e
introducir actividades de menor exigencia cuando la curva de atención va
descendiendo.
También implica
saber hacer pausas, para “dar un respiro” y retomar la
concentración. He tenido profesores que eran verdaderos artistas en esta
gestión del tiempo y no eran licenciados en pedagogía precisamente.
Limitaban el tiempo de esas explicaciones y sabían introducir pequeñas pausas
en las que nos contaban “sus “batallitas personales“. Seguro que
tenéis experiencias similares.
3º.
Reducir los estímulos distractores
La atención es un filtro
cognitivo, que
selecciona entre los estímulos relevantes y los que no lo son. Cuanto más
reduzcamos los posibles distractores mejor rendimiento obtendremos.
Esto supone, cuidar
las condiciones ambientales, que los chicos estén cómodos, que no haya
interrupciones, retirar aquello que pueda distraer de la mesa de los chicos. No
pasa nada por perder unos segundos en pedirles que retiren todo de la mesa.
Un profesor colocaba
un cartel en la puerta de la clase cuando iba a explicar: “no
interrumpir, estamos explicando” y de esta forma evitaba visitas que
cortaban el hilo de la concentración.
Hablar en un tono de voz demasiado
elevado o gritar con excesiva frecuencia, es un estímulo estresante que
favorece la distracción, por ejemplo.
4º. Apoyo
visual
La cuarta estrategia para
mejorar la atención en clase se refiere al apoyo visual. Cuando las actividades
se realizan con apoyo visual, mejora la atención y la concentración se prolonga
mucho más. Algunos profesores pretendéis que vuestros alumnos de Infantil,
de Primaria o de Secundaria, soporten explicaciones de 40 minutos con el único
apoyo de la voz del profesor.
Las presentaciones, el uso de imágenes, los
esquemas en la pizarra, o simplemente garabatear en el encerado, mejora
significativamente la atención. Si se quiere mantener la concentración solo de
oído, no pidamos demasiado tiempo a los chicos.
5º.
Cuidar los momentos de transición
En el aula y en una mañana
de clase existen diferentes momentos de transición: volver del recreo, cambio
de asignatura, de un examen a una clase… Es necesario cuidar estos momentos
para captar la atención.
Al volver del recreo, por
ejemplo, sin enfados ni gritos, hay que conseguir que los alumnos se serenen y
se centren: actividades como un dictado, una lectura, o unos ejercicios
de relajación puede hacer que los alumnos se serenen y se pueda captar
la atención.
6º.
Interaccionar positivamente con ellos
Hay profesores que están en
clase como si no hubiera alumnos: no los miran a los ojos, miran al horizonte,
hablan en voz baja, tratan de explicar cuando nadie les atiende…
¡Interacciona con ellos! Hazle
preguntas constantemente, interpélalos, pide su opinión. No pueden ser
sujetos pasivos sentados en su mesa: eso favorece el aburrimiento.
7º.
Favorecer su participación activa
Si de verdad queremos
mejorar la atención en clase, dad a los alumnos más protagonismo.
Cuando ellos participan activamente, todos están más atentos por que los
iguales, nos guste o no, son más significativos, sobre todo en adolescentes.
A partir de ciertas edades,
pueden exponer partes del tema, proponer actividades o realizarlas en grupo.
Cuando se realizan inicialmente, parece que no va a funcionar, pero cuando se
acostumbran a trabajar de esta manera, el rendimiento atencional mejora.
8º.
Reforzar a los alumnos que están atentos
Gastáis mucha energía en
llamar la atención al que no nos presta su atención: cambiad de
estrategia: alude, elogia, mira a los que están concentrados y atentos; en
la medida de lo posible ignora a los que no lo están.
Todos
presentamos necesidades educativas, pero algunos alumnos o personas presentan
necesidades educativas especiales. Estas tienen un carácter dinámico, ya que
aparecen entre las características propias del sujeto y lo que entrega el
sistema o programa de estudio. Las NEE no están siempre relacionadas con una
dificultad de aprendizaje, también pueden presentarse porque el alumno capta y
aprende demasiado rápido, por lo que necesita estar avanzando y aprendiendo más
cosas que los demás. Para ambos casos, deben realizarse adaptaciones
curriculares y buscar la metodología o estrategia de trabajo adecuada para
poder satisfacer aquellas necesidades educativas especiales.
Un
alumno tiene necesidades educativas especiales cuando presenta dificultades
superiores al resto de los alumnos para acceder a los aprendizajes que se
señalan en el currículo que le corresponde por edad (bien por causas internas,
por dificultades o carencias en el entorno socio-familiar o por una historia de
aprendizaje desajustada), y necesita, para compensar dichas dificultades,
adaptaciones de acceso y/o adaptaciones curriculares significativas en diversas
áreas de ese currículo.
LAS TIC COMO SOPORTE EN LAS NEE
Los niños y niñas con necesidades
educativas especiales (nee)se
enfrentan a un reto añadido, tanto en el día a día como en la escuela, ya que
suelen encontrarse sus oportunidades mucho más limitadas que el resto de sus
compañeros. Es por ello que docentes y el resto de la sociedad debemos aceptar
nuestra responsabilidadpara poder contribuir a que rompan
las barreras que les limitan.
Las nuevas tecnologías pueden ejercer un papel fundamental a la hora de
lograr incluir a todo el alumnado en el sistema educativo,
teniendo en cuenta las características de cada estudiante, más allá de que
tenga o no necesidades educativas especiales.
Las TIC
permiten mejorar la atención personalizada, logrando acercarse la igualdad de
oportunidades para todos y la correcta inclusión en nuestra sociedad. No
obstante,nunca debemos olvidar que las
tecnologías son meras herramientas, facilitadores que hacen más sencilla
la interacción con lo verdaderamente importante: las personas.
¿Qué mejoras aportan
las TIC?
En líneas generales, las nuevas tecnologías pueden ayudar a los niños con necesidades educativas especiales a ganar
autonomía y a interactuar
con su entorno sin ayuda externa; lo que directamente favorece su motivación y
autoestima, al verse más capaces de enfrentarse a nuevos retos…¡y superarlos!
Pueden consistir tanto en hardware adaptado (teclado
modificado, digitalizador de voz, tablets, ratones modificados, etc.) como en software educativo específico o
programas que permitan adaptar las actividades de aprendizaje. No obstante,
teniendo en cuenta que cada estudiante tiene unas necesidades muy concretas,
deberemos adaptar a ellas el uso de las diferentes tecnologías.
RECURSOS
EDUCATIVOS
Las nuevas tecnologías nos permiten adaptar
las clases a las capacidades y al desarrollo de nuestros alumnos, permitiendo
trabajar de un modo inclusivo que tenga las diferentes necesidades educativas
en cuenta. Para ello, aquí os dejo una selección de herramientas e ideas para
poder trabajar la diversidad funcional en
clase.
El caracol Serafín: Junto
a este personaje descubriremos diversos juegos y cuentos; todos ellos
acompañados de audio, imágenes y soporte textual. Las actividades ayudan a
aprender los números con fáciles órdenes de teclado, junto a diferentes objetos
y mascotas.
Whiz Kid Games: Una
aplicación en lengua inglesa que contiene dieciséis juegos terapéuticos
enfocados a acciones de carácter cotidiano, como vestirse, bañarse, ir a la
escuela…mediante los cuales los niños pondrán en práctica sus facultades
cognitivas.
El Pequeabecedario: Se
trata de un software educativo destinado a los niños más pequeños, entre 3 y 6
años que servirá como refuerzo para la adquisición de un primer vocabulario.
Cada palabra cuenta con el apoyo visual de animaciones y traducción a lengua de
signos y lectura labial.
El árbol
mágico de las palabras: Juego multimedia descargable
especialmente elaborado para niñas y niños con deficiencia visual, agrupando
las 21 actividades en dos niveles de dificultad. Permite trabajar con el
teclado del ordenador y con el ratón, y utiliza información auditiva y
refuerzos verbales de forma constante que posibilitan y motivan al niño la
comprensión del programa.
Aquí os dejo un Blog " Mi rinconcito especial" muy interesante en el que
hay diversidad de recursos de elaboración propia que usa una maestra de
educación especial habitualmente con sus alumnos, propuestas didácticas para
poner en práctica en el aula, materiales, ideas, etc.